Para finalizar el curso, los estudiantes de 1ºBachillerato tuvieron la oportunidad de explorar una variedad de órganos vitales como el corazón, el cerebro, riñones e hígado. A medida que descienden al interior del cuerpo humano, descubren cómo estos órganos trabajan en armonía para mantenernos vivos y funcionando. La práctica de disección de órganos no solo proporciona una comprensión más profunda de la anatomía humana trabajada de manera teórica, sino que también fomenta el desarrollo de habilidades prácticas, como la destreza manual, el trabajo en equipo y la capacidad de observación. Los estudiantes aprenden a identificar las diferentes estructuras y a comprender cómo se relacionan entre sí, lo que fortalece su capacidad para resolver problemas y razonar científicamente.
