Todavía tenemos el recuerdo del año pasado, que tuvimos que aplazar a septiembre y octubre los turnos de las Primeras Comuniones.
Este año, y pesar de los miedos y la inseguridad, se están celebrando en la Parroquia las Primeras Comuniones según el calendario previsto, siguiendo las normas higiénico-sanitarias y el aforo permitido. En este caso, por cada niño se han repartido 8 invitaciones controladas al entrar en la iglesia.
En un ambiente festivo, y con mayor intimidad que otros años por el límite del número de asistentes, los niños y niñas, acompañados de su familia y catequistas, han celebrado con gozo este acontecimiento importante en su vida cristiana. Jesús mismo viene a habitar en ellos y en nosotros cada vez que comemos de su Cuerpo, pan de Vida.
Agradecemos de corazón a los catequistas la dedicación durante estos años para que los niños de la Parroquia conozcan más a Jesús.
